Las puertas son un elemento imprescindible en el interior del hogar. Estas nos permiten separar espacios para proporcionarnos un poco de intimidad. Y nos resulta casi imposible imaginar un hogar sin ellas.
Pueden ser utilizadas simplemente para distribuir el espacio, crear ambientes diferentes en las distintas estancias del hogar o, incluso, para poner un toque de estilo en la decoración del hogar.
Existen infinidad de tipos de puertas para el interior del hogar y se pueden clasificar según diversos aspectos: materiales, diseño, tipo de apertura, o el lugar en el que vaya a ser instalada, etc.
En este post queremos que conozcas algunos de los tipos de puertas que existen en el mercado. También te explicaremos las características de cada uno de ellos. Además, te daremos algunas ideas sobre el lugar en el que podría ser instalada cada una de ellas. Si estás buscando ideas, quizás esto te ayude a decidirte.
En Prosemur te recomendamos elegir las puertas que mejor se adapten al estilo de decoración de tu hogar, al espacio y a las necesidades.
Tipos de puertas para interior según su sistema de apertura
La elección de la puerta con un sistema de apertura u otro dependerá del uso que vayamos a darle, del espacio que tengamos y del lugar en el que vaya a ser instalada.
Si tenemos en cuenta los tipos de puerta que existen para el interior del hogar podemos diferenciar entre: puertas abatibles, puertas correderas sobre doble tabique con contramarco, sobrepuestas con guías a pared o techo o puertas plegables.
- Puertas con apertura abatible:
Las puertas con sistema de apertura abatible es una de las más comunes. Este tipo de puerta es la más habitual en cualquier hogar. Seguramente en tu casa también cuentes con una o varias puertas de este tipo.
Su sistema de apertura funciona formando un ángulo con respecto a la pared. Una de las principales desventajas de las puertas de interior con sistema de apertura abatible es que ocupan mucho espacio al ser abiertas.
Por eso, no es recomendable instalarla en aquellos lugares que cuenten con un espacio reducido.
Este tipo de puertas, además, puede ser de una o de dos hojas. Normalmente son instaladas en aquellas estancias del hogar que cuentan con suficiente espacio, como suele ser el caso del salón. Normalmente esta estancia del hogar suele ser la más grande, por lo que contar una puerta abatible de doble hoja podría ser un gran acierto.
- Puertas correderas:
Las puertas correderas son una opción ideal si no cuentas con demasiado espacio. Pueden ser instaladas sobre doble tabique con un contramarco. Este tipo de puertas no ocupan espacio al ser abiertas, ya que quedan perfectamente integradas en la pared. Su única desventaja es que para ser instaladas es necesario llevar a cabo una pequeña obra.
- Puertas sobrepuestas:
El sistema de apertura de las puertas sobrepuestas es igual al de las puertas correderas. Sin embargo, en este caso, la puerta queda suspendida sobre una guía fijada en la pared. Este sistema, se emplea cuando no se tiene espacio y no existe doble tabique para alojar la puerta en el mismo.
Las puertas correderas para interior pueden ser una gran opción en cuartos de baño pequeños, por ejemplo.
- Puertas plegables:
Como su propio nombre indica, las puertas plegables son aquellas que se pliegan en paneles al ser abiertas. Esto significa que nos permite abrirlas total o parcialmente, según nuestras necesidades. El resultado es parecido al de las puertas correderas o sobrepuestas, pero su sistema es diferente.
Las puertas plegables están compuestas por un riel que permite que las hojas se deslicen para sobreponerse una encima de la otra.
Las puertas de interior plegables son una opción interesante cuando queremos separar ambientes y buscamos la optimización del espacio. Este tipo de puertas apenas ocupan espacio y no requieren obra.
